jueves, 29 de enero de 2009

Y el maestro Raul Barbosa nos regala su versión original



Mientras disfrutamos del hermoso paisaje de ls Provincia de Corrientes, lugares para disfrutar, fauna y flora para admirar.

martes, 27 de enero de 2009

lunes, 26 de enero de 2009

Daniel Oscar Almada nos deja su saludo y recuerdo

HOLA "LA 43"

Soy Daniel Oscar Almada, nacido en Basavilbaso, viviendo hace ya 8 años y medio en Cordoba Capital, los del pueblo que me conocen de gurí (familiares, vecinos, amigos, compañeros de la primaria en la querida escuela 58 La Pampa) soy Oscarcito y a pesar de mis casi 55 pirulos todavía así me llaman, cosa que me halaga, para los demás soy Daniel. Hijo de Oscar Almada y Pili Ledesma , ahijado de los recordados doña Delia Fournier y don Pedro Ceferino Scabini, llevo el 100% de sangre y genes ferroviarios y fraternales (de La Fraternidad, gremio de los conductores). Debido a ello no he cortado el corton umbilical que me une por siempre a Basso, a pesar de las distancias y las perdidas familiares.-Por ello y gracias a los hijos de Nestor Gorge (gran amigo y colaborardor de mi viejo, cuando éste fue secretario de la Seccional de la Capital de los rieles, allás por los `60) quienes mediante de la FM Riel me hicieron conocer vuestro blog, que asiduamente visito, se me ocurrió enviarles una página de la Revista Anteojito, que revolviendo recuerdos que me dejaron mis padres, descubrí hace poco; por lo que veo, este hoja se la envió a mi padre, su nieta, mi unica sobrina, y supongo que será de la decada de los 70. Se trata de un articulo publicado por la revista infantil en su página dedicada a los recuerdos de infancia de los lectores mayores. El autor era (o es, en estos tiempos debe ser un noble octogenario) amigo de mi padre, nacidos ambos en Holt, don Miguel Angel Troyelli, quien en el recuerdo habla de otra locomotora hermana de la 43, la 335. Debido a que uds se dedican a rescatar la historia de nuestros ferrocarriles, que dieron vida a nuestros lares, me pareció oportuno enviarselos, para vuestros archivos y recuerdos como una humilde colaboración, esperon que la disfruten como yo volví a hacerlo ahora, pues ya la conocía cuando se publicó en su momento, mi papá la guardaba junto a sus mas preciados recuerdosQuiero felicitarlos por vuestra idea, por el trabajo apasionado que están llevando a cabo, de registrar y hacer perdurar las raices de nuestra querido Basavilbaso. Deseo enviar mi mas calurosos abrazos a mis hermanas en baustimo (no se si existe una palabra que designe a esta unión) Zuli y Loli Scabini que hago extensivos a todos los integrantes del Grupo de Estudios Historicos "La 43".
Con afecto
Daniel Almada

El recuerdo para saborear...


La 335
Los recuerdos de la infancia tienen la magia de refugiarse en los lugares más insólitos, en las cosas más pequeñas y como en este caso, en un simple número… 335. Así escrito poco o nada dice, pero…¡cuánto encierra!
La historia de este recuerdo se remonta a muchos años atrás. Mi querido y siempre recordado padre, era maquinista ferroviario. Mis hermanos y yo aprendimos a querer a las locomotoras, a entender su silbato, ya que nuestro padre, cuando pasaba manejando una de ellas, nos hablaba en un idioma en clave, que él y nosotros conocíamos, haciendo sonar el estridente silbato. Nosotros lo veíamos desde nuestra casa, nuestra humilde casa ubicada en la pampa entrerriana, y trepado a los árboles, agitábamos pañuelos respondiendo su llamado.
Muchas veces nuestro padre nos llevaba a pasear en “su” locomotora. Era la 335 y los peones y vaporistas, a pedido de él, la tenían hecha un chiche, como mi padre decía. Exactamente el Holt y Basavilbaso, mis hermanos y yo disfrutábamos de ese mágico recorrido de curvas y contracurvas, puentes ríos, arroyos, cañaverales. Era un viaje lleno de alegrías, de risas, de cálido afecto.
Pero he aquí lo más lindo. Hace poco en uno de nuestros frecuentes viajes a Lynch, donde aún llegan esas viejas locomotoras del viejo F.C.E.R. encontramos a la 335. Yo soy un hombre maduro y no me avergüenza decir que al verla se me llenaron los ojos de lágrimas y, acercándome hasta ella, la acaricie como si se tratara de un sueño. Por un instante me vi otra vez pequeño, de la mano de mi padre, ese hombre humilde y laborioso que me dejó la mejor herencia que puede dejarse a un hijo: su noble ejemplo.

Miguel Angel Troyelli

sábado, 10 de enero de 2009

LA INTERDISCIPLINA EN LA HISTORIA Natalia Tielve García, Profesora de Historia del Arte en la Universidad de Oviedo


En lo transcripto se revela el trabajo transdisciplinar y multidisciplinar para el tratamiento de los hechos históricos. Una vez más se hace mención aquello de trabajar, seriamente, en equipo, en el área de la investigación. Esto podemos hacerlo extensivo al tratamiento de los contenidos en el ámbito de la enseñanza, juntar conocimientos y esfuerzos para presentar distintos temas a los alumnos bajo la óptica de las distintas ciencias que se enseñan en la escuela.
Como reza el viejo refran: "Una mano lava la otra y las dos lavan la cara". Con esta actitud en el tratamiento de los temas escolares podemos ayudar a nuestros alumnos a comprender la realidad de la misma manera que se le presenta en la vida, atravesada por los distintos campos del conocimiento.
"La revolución de las telecomunicaciones ha cambiado y cambia los procesos de obtención, recuperación, transmisión y almacenamiento de la información; la tecnología multimedia introduce una nueva concepción en las formas de comunicación en la ruta de la autopista virtual, con las ventajas y peligros que ello conlleva. Ante este panorama, al historiador le queda el difícil reto de abordar nuevos asuntos de trabajo e incorporar tareas y procedimientos, desde perspectivas transdisciplinares, hasta ahora poco presentes en los estudios humanísticos, adaptados a las nuevas exigencias de nuestro tiempo. Se trata, como es obvio, de circunstancias que se necesita tener en cuenta, que suscitan un cambio en la forma de operar, aunque ello no implique una modificación en la función del historiador que, al fin y al cabo, es la de hacer Historia con la responsabilidad asumida de hacer llegar a la sociedad tan cerca de la verdad como sea posible. Esta veracidad va más allá de la mera transmisión de datos; éstos deben ser esclarecidos y contextualizados con rigor, traspasando la superficie plana de los hechos, sin caer en el posibilismo o la adivinación. [...] "Las herramientas empleadas para estudiar el pasado no son valederas para el análisis de los tiempos actuales ante la fugacidad y la vertiginosa producción y consumo de noticias. Las tecnologías de la comunicación y de la información vienen produciendo un cambio trascendental en la aprehensión que el ciudadano tiene del mundo, de su entorno próximo y lejano. [...] "En la oleada de la actualidad, siempre en movimiento, continuamente renovada pero en la que no hay causalidad lineal, sino un curso general lleno de recovecos asistimos a una hiperinformación que paradójicamente nos hace correr el riesgo de caer en la desinformación. Detrás de cada noticia, hay todo un trabajo de presentación, toda una serie de intereses y a veces de azares. Se escoge un país, un acontecimiento, el fin de una frase en lugar de otro -al tiempo que se produce la anulación social de lo que se ha decidido no mostrar- a pesar de ese supuesto rótulo de la objetividad periodística. Ahí está la mistificación; ninguna mirada es objetiva: siempre hay mediaciones psicológicas, ideológicas, políticas... Bajo la premisa de “el público es nuestro único juez”, la información se somete a las leyes de la oferta y la demanda. En consecuencia, será objeto de la información lo que tiene un mercado. [...] "El modelo de sociedad actual exige, por consiguiente, un esquema de conocimiento aplicable a la realidad, pragmático y operativo en aras de suministrar explicaciones a la cadena de episodios de distinto tipo y carácter que día a día nos llegan a través de los medios. Se trata de aportar legibilidad a las decisiones y prácticas en el ámbito político y socioeconómico; de formar argumentaciones en torno a la irrupción y el desarrollo de los hechos; de contribuir a la comprensión del contexto comunicativo e icónico y de proyectar todos estos conocimientos sobre el futuro. La flexibilización, la investigación comparativa y el diálogo interdisciplinar supone una superación de la clásica rigidez científica; superación en la que los límites de las ciencias se esfuman y ya no pueden ser adscritos como pertenecientes a una parcela específica del saber. [...]

Como siempre quienes quieran tener el texto completo dirigirse a gehla43@yahoo.com.ar indicando datos personales completos, actividad que realiza y utilidad que le dará al material.

miércoles, 7 de enero de 2009

Memoria e historia. Una experiencia metodológica para una sociología de la memoria.

Se transcribe un fragmento de la ponencia de Elisabet Almeda Samaranch y Dino De Nella integrantes del Grupo Copolis "Bienestar Comunidad y Control Social. Departamento y Análisis de las organizaciones. Universidad de Barcelona.

"En las últimas décadas del siglo XX, el uso de las historias y los relatos de vida como un instrumento de análisis social introdujo nuevos elementos para reordenar el discurso político, jerarquizando a los protagonistas y sacando de su lugar preferente a las élites de poder. La primacía de los estudios cuantitativos (series de precios, salarios, conflictos, etc.) fue cediendo terreno a favor de los estudios más cualitativos. Sin embargo, los primeros documentos que se incluyeron a la "legitimidad científica"de las fuentes oficiales fueron los archivos de carácter privado o personal anteriormente excluidos, permitiendo así a los historiadores sociales “estudiar las condiciones de las clases subalternas, de las mujeres, de las formas de oposición política durante el fascismo o de la discriminación de los judíos” (Montesperelli, 2005: 27). Estos otros archivos pueden comprender cartas, biografías y autobiografía, diarios personales y otros documentos "no oficiales" de la época como los papeles de familia, los cuadernos genealógicos, los registros domésticos, las cartas, las notas, etc.. Posteriormente las biografías de los grandes personajes que han protagonizado hechos cruciales de la historia comenzaron a utilizarse. Se trata de informadores e informadoras privilegiados del objeto histórico observado, por estar éstos muy próximos, y tener en muchos casos un contacto directo con el fenómeno estudiado. Sin embargo, en este ámbito biográfico la novedad en los últimos años es el interés creciente por las biografías y los relatos de la vida de las personas anónimas que también vivieron el pasado reciente. La comprensión de estos testimonios no se agota en una primera aproximación, sino que son depósitos de experiencias que guardan gran cantidad de datos que se irán desvelando en un futuro, cuando se renueven los temas de interés o cuando la investigación futura requiera nuevos contrastes de fuentes. Al mismo tiempo, la literatura, a través de novelas de época, permite acercarnos de manera directa y sencilla a los matices del pasado. A pesar de provenir del mundo artístico y desde perspectivas parciales y subjetivas, en especial de la literatura y en forma más reciente del cine, estas fuentes también nos pueden trasladar a tiempos pasados -tal vez con menos rigor científico pero a menudo con más intensidad y relieve- y pueden servir de fuente de información, especialmente de difusión masiva, de hechos del pasado. Las novelas actuales sobre el pasado reciente se parecen al caso de los testimonios reales, en el hecho de que desde una subjetividad manifiesta y explícita nos acercan a una época o a un proceso social que puede ser mostrado, entendido, transmitido y registrado de mejor manera en la memoria colectiva que a partir de la historiografía y los documentos oficiales.
Hay otras fuentes con diversos grados de aceptación, pero en todos los casos con un creciente grado de interés y consideración por la información que ofrecen, aunque no provengan de fuentes oficiales. Hablamos de las fotografías, los videos (de producción cada vez más democratizada), los carteles publicitarios y propagandísticos, los documentos gráficos, el cine, la televisión, las músicas, los periódicos, etc. Una categoría especialmente relevante de registro audiovisual la forman los documentales, tanto de la época -con mucho más peso historiográfico- como los posteriores, de variada credibilidad, rigor científico y social. El costumbrismo y la vida cotidiana -que puede llegar principalmente a través de los registros fotográficos o literarios-, el estudio de cómo vivía la gente, los tipos de casas, la distribución de sus espacios y los muebles, las fiestas mayores, los encuentros familiares, las modas, los vestidos, las comidas, entre otras expresiones del acontecer cotidiano, contienen también indirectamente –y a menudo muy directamente- un alto valor informativo para la observación sociológica del pasado reciente."


De esto se trata el trabajo que estamos realizando con el Grupo de Estudios Históricos, por eso solicitamos a todas las personas de Basavilbaso y la zona que colaboren con las entrevistas, facilitando escritos, lecturas de los trabajadores del riel, fotografías, objetos de uso de los obreros ferroviario para hacer un archivo digital de todo ello. De esta manera nos ayudarán a reconstruir el pasado reciente de nuestros pueblos.

A quienes deseen contar con el material completo, dirigirse a gehla43@yahoo.com.ar colocando sus datos completos, profesión, su relación con el tema y la utilización que le dará al material.